julio 25, 2009

No estás

Es una crueldad. Tener que respirar cuando mi mente conspira para no hacerlo. Como explicarle a mi corazón que deje de latir cuando la voluntad divina se impone a mis propios deseos, donde estabas Dios? Distraído... Ocupado?. Me abandonaste.
En este lado del infierno, no hay estrellas, sólo una noche larga y fría. El día se ha hecho sombra entre árboles tristes, se ha caído el cielo, sólo queda esta soledad eterna, la misma que tu tuviste, la misma en que estás, donde el viento no se devuelve, mis sonrisas caen ante la mirada que se nubla por ríos de lágrimas.
Tu existencia fué tan breve, como vela que va apagando el viento, como una flor que se marchita, mis caricias jamás te tocaron, sólo mi voz que viajaba por el aire y rebotaba en su eco, mi vientre ha quedado como un desierto, estéril, mi entrañas llenas de ilusiones perdidas, donde no hay vida que pueda florecer, .solo eso la muerte, es la que me acompaña.
Una juego inocente, asesinó nuestro sueño, sentenció tu destino, mi pedacito de amor, mi pedacito de carne, a quien le digo que te quiero tanto, te fuiste y no pude despedirme de ti. Es una condena iluminar la vida de otros y no pude darte mi luz para que existieras.
Llegará el día de nuestro encuentro, lo espero, para besarte, acariciarte, darte mi calor, llenarte de primaveras y poner fin a todo mi invierno, perfumaremos el aire con nuestras risas, cerraremos nuestros ojos, para buscarnos en nuestro silencio.

No hay comentarios: